por: Elena Velásquez
01/11/2019 | 8:00 pm
@senosayuda
Según un estudio, un tipo de células T gamma delta que se encuentran en el tejido mamario, podría ser la clave para acabar con el cáncer de mama.
De acuerdo a la investigación en conjunto de varias instituciones británicas, estas células inmunitarias poseen un grupo de receptores sensibles a las señales de estrés que, generalmente, se desatan en el organismo a raíz de alguna infección o desarrollo de algún tipo de cáncer.
En este sentido, los especialistas estudiaron la relación entre la cantidad de células T gamma delta con respecto a las probabilidades de vida de 11 pacientes que padecen cáncer mamario triple negativo, uno de los más difíciles de combatir, y descubrieron que, aquellas mujeres que tenían mayor proporción de estas células en los tumores cancerígenos, también tenían más posibilidades de continuar viviendo.
Asimismo, el estudio reveló que de las 11 pacientes, cinco de las seis que tenían mayor cantidad de células T gamma delta, sobrevivieron a la enfermedad; motivo por el que uno de los co-autores de la investigación, Wu Yin, indicó que estas células podrían ser una opción para que próximamente, se pueda «mejorar las posibilidades de supervivencia de un paciente activando artificialmente más de estas células para combatir las células tumorales» e incluso «transferir células de un donante».